A punto de cumplir 46 años, Jodie Foster sigue pisando fuerte en el mundo del cine. La excelente actriz se atreve ahora con una comedia infantil, La isla de Nim, donde interpreta a una escritora tímida y nada valiente que vive recluida en su piso. Una niña con mucho carácter, Abigail Breslin, se encargará de sacarla de su letargo.
Su papel es el de una mujer solitaria. ¿Alguna vez se ha sentido realmente sola?
La soledad no tiene por qué ser algo malo. Uno crea su mundo, un lugar delicado al que nadie puede acceder, es sólo suyo. Para mí la soledad es una experiencia bonita, enriquecedora.
Entonces, ¿es una mujer solitaria?
No, ni mucho menos. El ser humano necesita comunicarse, es un instinto que no podemos evitar.
En el filme se atreve a viajar a una isla perdida. ¿Cuál ha sido la mayor aventura de su vida?
He viajado mucho. El tipo de viaje que haces a los 40 es muy diferente a los que haces en tu juventud. Hice un viaje a la India con 20 años que me cambió de diferentes maneras.
El miedo es un tema común en sus películas. ¿A qué le
teme?
Me da miedo cometer errores, tomar las decisiones incorrectas. Soy un poco perfeccionista.
¿Como su personaje en La isla de Nim?
¡Sí! No dejo que nadie toque mi cafetera. A mis hijos les tengo prohibido que toquen mis toallas de baño. Tampoco que hagan pis en mi retrete.
¿Le gustaría que sus hijos siguieran sus pasos?
No. Esto no quiere decir que me arrepienta de ser actriz, pero te pierdes cosas. Psicológicamente es complicado. Hay actores maravillosos que no pueden aguantar el tipo o llevar este estilo de vida, y lo entiendo perfectamente.
Abigail Breslin también es una actriz precoz como lo fue usted. ¿Fue fácil trabajar con ella?
Me encanta trabajar con niños. Me gusta el hecho de que puedes ayudarles a hacer cosas que no son naturales para ellos. Les das una orden y enseguida lo olvidan. Me encanta
Fuente:diariometro.es
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